Jack London deja el alcohol
En el manco silencio de la tarde
toda mi vida dícese de río;
aguas que son para mi pobrerío
apenas la tristeza de un emparde.
toda mi vida dícese de río;
aguas que son para mi pobrerío
apenas la tristeza de un emparde.
De los cartas que jugué, no hago alarde:
este naufragio es mío y solo mío.
Y así voy, en mi pájaro sombrío,
que en su ramaje de ocasos vive y arde.
este naufragio es mío y solo mío.
Y así voy, en mi pájaro sombrío,
que en su ramaje de ocasos vive y arde.
Pero hoy pongo a la tarde por testigo:
voy a morir jornada tras jornada,
sin la sombras de pájaros conmigo
voy a morir jornada tras jornada,
sin la sombras de pájaros conmigo
ni naipe que me sirva como espada.
y que la muerte llévese consigo
el horror de perderme entre la nada.
y que la muerte llévese consigo
el horror de perderme entre la nada.
Marcelo Jaurane
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